La nueva Ley de Vivienda podría tumbar el proyecto de las cocheras de Cuatro Caminos

Ayuntamiento y Comunidad trabajan para que el plan siga adelante

La entrada en vigor de la nueva Ley de Vivienda estatal amenaza con dar la puntilla definitiva al proyecto residencial en las antiguas cocheras de Metro de Cuatro Caminos. Las 443 familias cooperativistas han señalado que viven el momento “más complicado” tras casi 10 años de espera, apenas unos meses después de que el Ayuntamiento de Madrid aprobara definitivamente el proyecto y lo elevara a la Comunidad de Madrid para su luz verde definitiva.

Sin embargo, el Gobierno regional no llegó a tiempo del ok definitivo, y llegó mayo, las elecciones y la aprobación de una Ley de Vivienda que, según la Dirección General de Urbanismo de la Comunidad de Madrid, eleva el porcentaje de cesión de vivienda protegida en las promociones del 10 % al 20 %. Un cambio que dejaría fuera del proyecto a más de 50 socios de la cooperativa, lo que supondría la devolución de lo aportado a dichos socios y encarecería notablemente las viviendas, lo que, según los afectados, “llevaría a la disolución de la cooperativa”.

Por el momento, el proyecto está paralizado y el expediente devuelto al Ayuntamiento “para su revisión”, según el consejero de Medio Ambiente, Interior y Ordenación del Territorio, Carlos Novillo, que ha lamentado que la nueva legislación “no incorporase una disposición transitoria, como suelen llevar estas leyes, que respete los expedientes que ya se están tramitando”. Novillo, que se reunió a finales de julio con los cooperativistas, ha asegurado que el Gobierno regional trabaja “en la continuidad del proyecto residencial de las cocheras, a pesar de las trabas de la Ley de Vivienda de Sánchez”.

Sea como fuera, los cooperativistas necesitan una salida urgente tras una década de espera, y solicitan que la ley no se aplique “con carácter retroactivo a expedientes en tramitación. Si es necesario, que se modifique la Ley del Suelo de la Comunidad para que evite el atropello a tantos ciudadanos, cuyo único pecado fue comprar un suelo en subasta pública para tener un hogar, y además mejorar las infraestructuras de un barrio”, señalan en un comunicado. Tras la reunión mantenida con el consejero, las 443 familias de la cooperativa confían en que el proyecto pueda volver a ser aprobado a finales de este año, para lo cual este septiembre el Ayuntamiento de Madrid debería volver a dar el visto bueno al plan en el pleno de finales de mes.

Por su parte, el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, también ha subrayado que el Consistorio “ha cumplido los plazos”, y ha achacado a la “Ley nefasta de Vivienda” el nuevo escollo del proyecto. Además, ha asegurado que tanto el Ayuntamiento como la Comunidad están colaborando con los vecinos, tanto en adaptar el planeamiento a la nueva ley como sometiéndolo al criterio de la comisión jurídica asesora, por si fuera posible entender que la legislación no afectaría a planeamientos con un largo recorrido, como es el caso de las cocheras, cuyo expediente se inició en 2014. “Aquellos proyectos que ya tenían aprobación inicial no debían verse afectados por esa ley. En todo caso, pedimos paciencia a los propietarios, a los cooperativistas”, ha añadido Carabante.