Desde que comenzó el verano, el Área de Gobierno de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid se encuentra realizando unos trabajos de mejora de las zonas ajardinadas y el área canina perteneciente al Parque Enrique Herreros. Su objetivo es mejorar los usos y la percepción de esta zona verde del distrito, y está previsto que los vecinos puedan volver a disfrutar de las instalaciones a finales del mes de octubre.
Este proyecto, a cargo de las Inversiones Financieramente Sostenibles (IFS) de 2019, cuenta con un presupuesto de más de 300.000 euros con los que está acometiendo las obras en dos sentidos, relacionados con los elementos del parque y la reubicación de la zona canina. En relación al primer punto, está contemplada la sustitución de los bordillos y la remodelación de las dos pistas de petanca. En la escalera del mirador se instalará una barandilla y se normalizarán los elementos de mobiliario urbano haciendo totalmente accesible el itinerario peatonal. Además, también se sustituirá la pérgola existente en la plaza.
Respecto a la flora existente también están previstas un gran número de mejoras. Se perfeccionará el riego, se moverán los bancales del huerto para mejorar su accesibilidad, se habilitarán zonas de pradera que también contarán con sistema de riego, y se plantarán una serie de árboles y arbustos entre los que destacan ciruelos, liquidámbar, rosales y lavándulas.
Traslado y ampliación de la zona canina
Por otra parte, la zona canina sufrirá una remodelación completa que favorecerá el disfrute de la misma. El lugar donde en la actualidad se encuentra este espacio reservado para los perros no dispone de sistema de drenaje, por lo que cuando llueve se encharca y se convierte en una zona inservible durante días. Por esto, se construirá una nueva zona más amplia que la anterior en el fondo del parque, ya que se trata de un espacio sin problemas de drenaje ni riesgo de encharcamiento. Los trabajos prevén la instalación de una valla con una puerta de acceso y arbustos adosados para evitar salpicaduras de arena, y también se colocarán papeleras.
En este sentido, el área que quedará libre tras desplazar la zona canina al fondo de los jardines será transformada en un espacio estancial con bancos y jardineras para arbustos con sistema de riego por goteo incorporado.
Los jardines de Enrique Herreros, ubicados entre las calles de Bravo Murillo y Cea Bermúdez, ocupan 6.666 metros sobre el aparcamiento para residentes de la calle Bravo Murillo. Esto supone que los trabajos que se están acometiendo deberán respetar también la impermeabilización del recinto y para lograrlo las labores de demolición se realizarán en los primeros 20 centímetros desde el pavimento de hormigón impreso. Las obras de mejora comenzaron a principios del pasado mes de julio y está previsto que se extiendan hasta finales del mes de octubre cuando está prevista su reapertura.
Deje un comentario