Abrirá “dentro muy poco”, según el concejal Javier Ramírez
La sala de lectura de Blasco de Garay homenajeará al escritor Fernando Vizcaíno Casas
Chamberí 30 días, 9 de octubre de 2021
La sala de estudio y lectura que, según el concejal del distrito, Javier Ramírez, abrirá “dentro de muy poco tiempo” en Blasco de Garay, 38, en el antiguo espacio que ocupaba el centro de mayores, llevará por nombre el del escritor Fernando Vizcaíno Casas, fallecido en 2003. Así se aprobó durante el pasado Pleno de Chamberí, con los votos favorables del PP, Ciudadanos y Vox, y en contra de Más Madrid y PSOE.
Ramírez defendió la iniciativa de bautizar la citada sala con el nombre de “uno de los autores contemporáneos más leídos en España e Hispanoamérica, que además trabajó y vivió en Chamberí”. Abogado laboralista de brillante trayectoria, Vizcaíno Casas se inició como periodista a los 16 años, y llegó a escribir en numerosas cabeceras, entre ellas ABC, Las Provincias, El Alcázar, Triunfo o Interviú. En los años 50 llegó a Madrid desde su Valencia natal y fijó en este distrito su residencia y su despachó de abogados, en la calle de Fernando el Católico, “donde ejerció su profesión durante casi 45 años”.
Como autor publicó más de 70 libros, entre ellos algunas sátiras políticas que se convirtieron en best sellers de la Transición, entre los que cabe citar Y al tercer año resucitó, De camisa vieja a chaqueta nueva, La boda del señor cura o Las autonosuyas. En total llegó a vender más de cuatro millones de ejemplares de sus obras, y obtuvo numerosos premios literarios y teatrales, además de la medalla de oro al Mérito del Trabajo en 2001.
La decisión mereció un no “rotundo” por parte de los grupos de Más Madrid y PSOE. El portavoz de este último, Iñaki Prieto, puso en tela de juicio la “calidad literaria” y el pensamiento político del autor homenajeado, y señaló que la distinción “incumple el acuerdo de nombrar los espacios públicos con nombres de mujeres, ya que están infrarrepresentadas, como se hizo con Concha Méndez o Matilde Ucelay, y que se podría haber hecho, por ejemplo, con María de Maeztu”.
Por su parte, desde Más Madrid se aludió a la ideología conservadora del abogado y escritor, y se abundó en la idea de que “Chamberí no puede seguir reflejando una desigualdad de género en sus calles, edificios y reconocimientos públicos”.
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