El Beti Jai tendrá una cubierta traslúcida y se abrirá a actividades culturales además de las deportivas

La Junta de Gobierno aprueba inicialmente, y tras cerca de cuatro años, el nuevo Plan Especial, que mantiene el uso deportivo como prioritario y eleva un 10 % la edificabilidad bajo la pista

El frontón Beti Jai seguirá teniendo como uso principal el deportivo, aunque se abrirá también a eventos culturales y educativos; además, tendrá una cubierta ligera, translúcida e independiente, que no altere su protección como Bien de Interés Cultural.

Estas son las novedades del nuevo Plan Especial que la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid acaba de aprobar inicialmente para el histórico frontón de Marqués de Riscal, casi cuatro años después de que el Tribunal Superior de Justicia anulara el plan anterior debido a la ausencia de estudio económico-financiero, acústico e insuficiencia de varios informes.

Unas deficiencias que corrige el nuevo plan, con el objetivo de poner en valor este edificio singular y permitir que, definitivamente, entre en funcionamiento para disfrute de los madrileños.

El edificio Beti Jai es de titularidad municipal, ocupa el centro de una manzana, rodeada de viviendas, y tiene una superficie construida de 4.579,94 m². Aunque en 2019 se terminaron unas obras para recuperar este inmueble y salvarlo de la ruina, actualmente se encuentra en desuso, debido en gran parte a las limitaciones que acarrea su condición exclusiva como uso dotacional deportivo.

Una limitación que corrige este nuevo plan, elaborado por el Área de Desarrollo Urbano, al ampliar los usos asociados y alternativos para que se pueda disfrutar. Así, se incorpora el uso de equipamiento en sus categorías de cultural y educativo como uso alternativo, en coexistencia con el actual uso deportivo.

Cubierta traslúcida y un 10 % máss de edificabilidad

Desde el Ayuntamiento se señala que esta ampliación del régimen de usos facilitará la puesta en funcionamiento del edificio sin perjuicio de la protección de sus características arquitectónicas y manteniendo las actividades deportivas como prioritarias, incluidas las de tipo pelota. Esta apertura a otros usos complementarios ya figuraba en la declaración BIC del frontón.

Por otro lado, el nuevo Plan establece también las siguientes prescripciones particulares:

• Se podrá autorizar el cubrimiento del patio y de la cancha de juego en las condiciones previstas en las normas urbanísticas, de modo que la superficie cubierta no compute a efectos de edificabilidad. Siempre que se ajuste a lo establecido, la cubierta será traslúcida, ligera y disociada de la edificación, sin afectar a los valores que motivaron la declaración del inmueble como BIC, de forma que desde el espacio interior se pueda seguir apreciando con nitidez el tratamiento de fachada urbana, creando la percepción de plaza pública.
• El incremento de un 10 % sobre la edificabilidad existente se podrá autorizar, en su caso, situado bajo la cancha de juego.
• No se podrá alterar la envolvente del edificio.

Tras esta aprobación inicial por parte de la Junta de Gobierno, el Plan se someterá al correspondiente periodo de información pública antes de su aprobación definitiva, cuya fecha no se ha especificado.

El Ayuntamiento prevé que el Plan Especial para que el Beti Jai pueda volver a entrar en funcionamiento costará entre 7 y 11 millones de euros, que podría sufragar una entidad privada, si finalmente la gestión del recinto fuera indirecta, como es la intención del actual equipo de Gobierno.