El homenaje a los “últimos de Filipinas” en el 120 aniversario del Sitio de Baler

Monumentos de Chamberí (XIII)

El 30 de junio de 1898 un pequeño destacamento de 54 militares quedó sitiado por una fuerza diez veces superior en la iglesia de San Luis de Tolosa, en la localidad filipina de Baler, en la isla de Luzón, la más grande de Filipinas y donde se encuentra Manila, la capital nacional.

Como homenaje a este hecho histórico, en la plaza del Conde del Valle de Súchil, al comienzo de los jardines del Almirante Pascual Cervera, se encuentra la escultura de Saturnino Martín Cerezo, militar cacereño y héroe después de encabezar la resistencia en la citada iglesia durante la guerra de Filipinas. A los supervivientes se les conoce popularmente como “Los últimos de Filipinas” porque resistieron durante 337 días sin saber que la guerra con este país ya había terminado.

La escultura

El monumento es obra del escultor madrileño Salvador Amaya, y fue creado a partir de un boceto del pintor realista especializado en pinturas de historia y batallas, Augusto Ferrer Dalmau. En él se representa al Teniente Saturnino Martín Cerezo, empuñando un arma y en actitud vigilante. La pieza, de bronce y de unos tres metros de altura, se alza sobre un pedestal en el que se puede leer una inscripción con la fecha de la efeméride, los nombres de los cincuenta y cuatro soldados que resistieron el sitio y palabras en su recuerdo. En su conjunto mide más de seis metros y pesa más de una tonelada.

El pedestal, además de inscripciones grabadas en la piedra, lleva relieves en bronce representando la Laureada de San Fernando y la Iglesia de Baler. En la parte posterior lleva una placa de los donantes.

Fue inaugurada el 13 de enero de 2020, con motivo del 120º aniversario del sitio, por el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y el jefe de Estado Mayor del Ejército, Francisco Javier Varela, junto con otras personalidades, como el vicecónsul de la embajada de Filipinas en Madrid, Ralf Roldán; la delegada de Cultura, Andrea Levy, portavoces y concejales del Ayuntamiento, así como descendientes de los conocidos como Héroes de Baler, por el nombre del pueblo donde tuvo lugar el asedio.

La instalación del monumento, impulsado por la Fundación Museo del Ejército y financiada mediante suscripción popular, fue aprobada en el pleno del distrito de Chamberí el 19 de marzo de 2019 “como expresión de admiración y gratitud de la ciudad de Madrid a la labor de las fuerzas armadas y a los valores que encarnan en su desempeño del mandato constitucional”. Además del descubrimiento del monumento en honor a estos militares, la parada militar y el homenaje a los caídos en Baler, la asociación ‘Los últimos de Filipinas’ hizo entrega de una medalla y un diploma de reconocimiento tanto al alcalde de Madrid como al general jefe del Estado Mayor.