Las obras en Olavide afectarán a seis calles y durarán cinco meses

Se ha tenido que esperar hasta el tramo final del verano, pero las obras en el entorno de la plaza de Olavide ya han comenzado. Hasta seis calles adyacentes serán remodeladas para facilitar el acceso y la circulación de los vehículos de emergencia y aumentar la accesibilidad de los peatones. Los trabajos cuentan con un presupuesto de 582.178 euros con cargo al Fondo de Reequilibrio Territorial del distrito de Chamberí, y el plazo de ejecución previsto es de cinco meses, por lo que deberían estar finalizadas el próximo mes de febrero.

El proyecto persigue un doble objetivo: garantizar una anchura mínima de calzada para asegurar el acceso de los servicios de emergencias a todos los edificios –algo que no se garantizaba con la configuración actual–, y mejorar la calidad ambiental del entorno de Olavide, una plaza que es núcleo y referente de sociabilización del barrio.

Calles afectadas por la actuación en el entorno de Olavide (Ayuntamiento de Madrid).

Con la reforma se convertirán en espacios peatonales los tramos de las calles próximos a la plaza, de manera que sirvan como antesalas. También se restringirá la circulación permitiendo el acceso a garajes de residentes, carga y descarga, emergencias y mantenimiento municipal. Además, la nueva configuración trae otras medidas complementarias, como el cambio de sentido del tráfico en Quesada, o medidas blandas de señalización en Santa Feliciana y Gonzalo de Córdoba.

Los espacios alrededor de la plaza tendrán todo el pavimento al mismo nivel, y se formarán tres áreas según el uso, que se diferenciarán mediante la pavimentación: la primera, destinada al tránsito peatonal, con anchura de al menos dos metros; la segunda, que albergará el arbolado –existente o de nueva plantación– y bancos, reconvirtiéndose de esa manera como área estancial; y, por último, se proyectará una franja de un mínimo de 5,5 metros de anchura, que se mantendrá sin obstáculos, por necesidades de evacuación y seguridad.

La actuación, calle por calle

Las vías incluidas en el proyecto se verán alteradas de las siguientes maneras:

Calle de Jordán: el tramo junto a la plaza se convertirá en zona de coexistencia, se plantarán cinco nuevos perales de flor y se instalarán ocho bancos. Anexa a esta zona se reubicará la reserva de aparcamiento actual. Además, entre Cardenal Cisneros y Fuencarral se ampliará la acera par, para dar continuidad al itinerario accesible y las zonas reservadas de aparcamiento se trasladarán a la banda impar.

Calles de Murillo-Sagunto: Se aumentará el espacio peatonal en la calle de Murillo –de unos 40 metros y un solo sentido de circulación–, uniéndola con la plaza y restringiendo el movimiento de vehículos a emergencias, mantenimiento y carga y descarga. En cuanto a Sagunto, se eliminará una banda de aparcamiento en línea y se repartirá el espacio obtenido para ampliar aceras y calzada. También se instalarán seis bancos y se plantarán seis perales en flor.

Calles de Palafox y Olid: en Olid se actuará de modo similar a Sagunto. Además, se eliminará el “fondo de saco” en que se ha convertido Palafox, entre Olavide y Olid, un tramo usado actualmente como bolsa de aparcamiento y zona de carga y descarga. La actuación aquí prevé ganar espacio para el peatón y limitar el paso a vehículos. También se plantarán ocho ejemplares de peral y se instalarán ocho bancos.

Calle de Raimundo Lulio: en el tramo inicial de esta vía se creará una plataforma peatonal de coexistencia, hasta la calle de Garcilaso, aprovechando que antes del proyecto ya se habían ejecutado obras de ampliación de la calzada similares a las de esta actuación.

Chamberí 30 días