Zahara: «Cuando zarandeas las conciencias, la obra se vuelve más interesante»

Tres años, un libro y un hijo después, Zahara (Úbeda, Jaén, 1983) regresa con su cuarto disco, «Astronauta», que nos sumerge en un viaje de emociones. 10 canciones sobre los cambios existenciales y la realidad de comenzar una nueva vida. Escribir sobre sus emociones e intentar hacer sentir mejor a la gente con sus canciones es su lema. Hace un tiempo se instaló en Chamberí con su familia, un distrito que desde el principio le pareció un buen lugar para vivir con un hijo. Le gusta el ambiente y sus tiendas. Está deseando que terminen las obras del Parque de Santander y nos recomienda las tostas de aguacate del Monkee Koffee.

Han pasado tres años desde su último disco. En este tiempo ha publicado una novela, un EP y ha sido madre. ¿Cómo ha cambiado su forma de entender el mundo la experiencia de la maternidad?

Todo suma. Es cierto que la maternidad es algo muy bestia, muy fuerte, que te conecta con las emociones y las necesidades de una manera intensa. No se parece a nada. Cambian mis prioridades y mi manera de optimizar el tiempo trabajando o relajada. Valoro más que nunca el hacer las cosas bien y no estar donde no quiero estar. Pero cómo está afectando a un nivel profundo aún no lo sé. Estoy en pleno proceso de eso.

¿Tener un hijo ha alterado su forma de plantearse y gestionar su trabajo?

El tiempo que estoy trabajando intento que sea intenso y productivo. Y ahora cuando tengo que irme a tocar lo paso un poco mal. Intento estar fuera el menor tiempo posible. Volver cuanto antes a casa, aunque eso implique dormir menos (dormir menos aún, jaja). También estoy tan agotada por las noches que se acabó el ocio nocturno. Lo cambio por los fines de semana al sol, yendo al teatro o quedando con amigos.

Hace unos dos meses salió a la venta ‘Astronauta’. ¿Cuánto de la nueva Zahara hay en los 10 temas que lo forman?

En las canciones siempre estoy yo. Desde que empecé a componer. Pero casi todas las de este disco están compuestas antes de ser madre, así que poco. La maternidad está presente en el concepto, en esa imagen en la que me veo como una astronauta dejando la tierra, sin saber si recuperará la vida. Hay una canción dedicada a mi hijo, pero el ser madre aún no está plasmado en él. Más bien habla del cambio vital, de empezar algo distinto, de decirle adiós a lo que eras.

zahara_miguel zaragoza La cantante Zahara (Foto: Miguel Zaragozá).

¿Cómo está viviendo las primeras impresiones y el feedback con su público?

Está siendo maravilloso. Mejor de lo pensado. Tengo unos seguidores que han crecido conmigo, otros que han llegado nuevos. Son respetuosos y entusiastas, me admiran, y eso hace que me sienta plena y feliz. Es muy fuerte saber que formas parte de la vida de personas que no conoces.

¿Cree que su posición de artista le da la posibilidad de transmitir aquellos valores en los que cree?

Creo que el artista tiene que ser libre y crear sobre aquello que sienta. A la par, la exposición pública, contar con tantos seguidores o ser el referente de tanta gente, sí que debería influir en nosotros e intentar usar eso para dejar el mundo algo mejor de lo que lo hemos encontrado. Cuando pasa, cuando no sólo emocionas, sino que zarandeas las conciencias, la obra se vuelve más interesante.

Es activa en redes sociales. Éstas se pueden utilizar como un altavoz al tener miles de seguidores.

Me gustan las redes sociales y creo que son importantes. Crecí en ellas. Tenía más de un millón de amigos en MySpace, una red que pocos recordarán. Cuando sabes que tanta gente está mirando, es interesante pararse a pensar en qué puede hacer una para hacer sentirse mejor a la gente. Soy una persona que tiene referentes y que me ayudan. Haber escuchado a otras mujeres posicionarse me ha hecho sentirme más segura, más fuerte, más feliz. Así que mi cometido es ése. Que quien me siga y me vea quejarme de algún momento duro de la maternidad, diga, “eh, yo también he pasado por ahí”, y se sienta menos sola. O que quien no se ha planteado nunca qué supone ser mujer y con qué miedos hemos crecido, lo vea. O por qué es importante cuestionarnos los hábitos sociales y de consumo que tenemos instaurados.

Hace unos años se trasladó a Madrid, ¿cuándo aterrizó en Chamberí, y qué es lo que más le llamó la atención al llegar?

Que era un barrio ideal para vivir aquí con un hijo. Es un barrio barrio. Con sus tiendas de toda la vida, su parque, sus señoras y señores paseando… Pero a la vez con cafeterías nuevas, con opciones sin gluten y veganas, con cines… Me encantó ver lo cómodo y completo que es. Me encanta este barrio. Me he sentido súper bien acogida.

¿Qué le aporta Chamberí? ¿Hace vida de barrio?

No hago otra, jajaja. De hecho consigo convencer a mis amigos para que vengan a verme. Me encanta salir a merendar, pasear con mi hijo por el Parque de Santander, ir a los Cines Verdi, al teatro, a Galileo. Está todo cerca, hasta el macrogimnasio. Me gusta hablar con mi portera, con el japonés al que le compro sushi, con los camareros del Rebel Café.

¿Hay algún lugar de Chamberí que le haya conquistado y recomiende a los recién llegados?

Me encanta una cafetería que se llama Monkee Koffee. La música es genial, el café, buenísimo y tienen unas tostas de aguacate que crean adicción.

¿Siente que hay algo que le falta y eche de menos?

Estoy deseando que terminen de arreglar el parque. Sé que hay un proyecto para convertirlo en el parque ideal, con más zonas deportivas, verdes, para pasear… Estoy deseando que quiten el campo de golf y por fin sea un parque de verdad. Cuando vi el proyecto se me saltaban las lágrimas de alegría.

Isabel Garrido

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