‘Axis’, el edificio “transparente” y sostenible de Norman Foster

El arquitecto británico Norman Foster volverá a dejar su impronta en Madrid, con una innovadora propuesta para el edificio de la Plaza de Colón, 1 –en la esquina del Paseo de Recoletos con Génova–, que supondrá la transformación integral del antiguo inmueble de la entidad bancaria Barclays. El rediseño ha sido encargado por CBRE Global Investors, dueña del edificio desde 2017, y en estos momentos ya han comenzado los trabajos de preparación de las obras, que se iniciarán en breve. El plazo de ejecución es de aproximadamente un año, y la inversión supera los 10 millones de euros.

Inforgrafía del proyecto, ubicado en la Plaza de Colón, 1.

Concebido como un espacio de uso mixto comercial y de oficinas, Foster plantea para este edificio de cuatro plantas una audaz fachada transparente con estructura en diagrid –patrón simétrico de vigas que se entrecruzan en diagonal–, lo que “establece  una nueva visión de la estructura existente de los años 70, volviendo a su esencia y creando un edificio flexible, preparado para el futuro y duradero”, señala el arquitecto.

El diseño emplea las últimas tecnologías para combinar la fachada transparente con una malla exterior que proporciona control solar y minimiza el consumo de energía, maximizando el concepto de sostenibilidad del inmueble, cuya superficie total es de 3.930 metros cuadrados.

Eje de tres distritos

El nuevo edificio se llamará Axis, que significa “eje” en griego, en clara referencia a su estratégica ubicación, en la Plaza de Colón, que conecta el sur con el norte de la ciudad, y en un punto en el que confluyen los distritos de Chamberí, Centro y Salamanca.

Se da además la circunstancia de que, al ser el estudio británico el ganador de la ampliación del Museo del Prado, cuando concluyan ambas obras “tendremos un paseo Foster, que arranca en  Colón y termina en el Prado”, según explicó durante la presentación del proyecto el coordinador general de Alcaldía, Luis Cueto. “Aunque el Prado sea algo futuro, ambos proyectos tienen algo en común –coincidió el propio Norman Foster– y es que están en conexión con un espacio público, ambos rompen las barreras que separan lo público de lo privado y se abren a la ciudad”.

Además de ambos proyectos, el célebre arquitecto británico cuenta ya con su huella arquitectónica en Madrid en la torre CEPSA, dentro del conjunto de las Cuatro Torres, y desde hace cerca de un año, con la apertura en Chamberí de su Fundación Norman Foster, que sitúa a la capital en “la vanguardia del debate del urbanismo mundial”, subrayó Cueto.

Chamberí 30 días